Tras conocer su caso sobre la posible negligencia de la que haya podido ser víctima usted o algún conocido o familiar, y tras la valoración de nuestro equipo de profesionales sobre las acciones a emprender encaminadas a obtener la mayor indemnización posible, según las lesiones o daños sufridos y en atención a otras circunstancias que deben tenerse en cuanta a la hora de su cuantificación, le daremos una seguridad y apoyo jurídico en la tramitación de su caso, de manera que usted tenga pueda tener la tranquilidad que para este tipo de situaciones sabemos que es lo primordial.
Cuando la negligencia se ha cometido por un médico o personal sanitario en una clínica u hospital privado, el trámite del procedimiento es diferente. En este caso acudiremos a la vía jurisdiccional civil, encontrando su fundamento en la responsabilidad contractual, por el que el paciente contrata el tratamiento o intervención médica. Si bien, como actuación previa, reclamaremos de manera extrajudicial la indemnización a la que usted tiene derecho como resarcimiento, en la manera de lo posible, de los daños sufridos.
Normalmente, de este tipo de negligencia responderá la Compañía con quién el médico en cuestión y el Centro Privado tenga contratada una póliza de responsabilidad civil, por lo que es usual que en esta fase extrajudicial podamos entablar con la Compañía acciones tendentes a negociar la posible indemnización. Desde nuestro despacho le daremos nuestro criterio en cuanto a la suma ofrecida, pues si ésta no es acorde con la gravedad de los hechos continuaremos el procedimiento iniciando la vía judicial, ya que nos sentimos comprometidos en que usted obtenga el mejor resultado posible y la máxima cuantía a la que tiene derecho.
Es en este ámbito de sanidad privada donde son numerosas las intervenciones de cirugía estética que se realizan en nuestro país. En muchas ocasiones en este tipo de operaciones no se obtiene el resultado deseado. Es entonces cuando nos planteamos si se debe a una mala praxis por parte del médico que realizó la intervención. En estos supuestos, una vez estudiado su caso, le damos el asesoramiento necesario para que tengamos claro las garantías de éxito que obtendremos de dicha reclamación.
Debe saber que en los supuestos en que lo que se contrata una operación de cirugía estética, en donde lo que se pretende es cambiar el aspecto del que contrata la operación, lo que se contrata es un resultado determinado y por tanto, el médico que realiza una operación de estética está obligado a obtener un resultado y no sólo a poner todos los medios posibles para conseguirlo.
Por lo que en este tipo de operaciones el paciente debe quedar mejor de lo que estaba antes, siendo aquí la responsabilidad del centro médico directa, por lo que podremos demandar tanto al médico como al centro si los resultados no son los esperados.
La profesión médica es realmente admirable e imprescindible y la mayoría de facultativos son competentes y actúan conforme a su buen saber y cuidan de nuestra salud, pero en los casos en que esto no es así encontramos que hay excesivo corporativismo, miedo personal y profesional (también ocurre con los abogados), siendo difícil encontrar médicos que testifiquen contra otros. Para reducir el índice de negligencias lo primero es aceptar el error por parte de los médicos, y lo segundo combatirlo.
Es un deber social que una víctima de una negligencia médica obtenga una reparación justa y equitativa, y a eso podemos contribuir todos, empezando por denunciar nuestro caso, pues con ello ayudamos a que no se vuelva a repetir. Siempre, evidentemente, que tengamos la convicción de que ha sido una negligencia y que seamos convenientemente asesorados por abogados y médicos especialistas en la materia que nos confirmen que, efectivamente, se trata de un error médico y no dejarnos llevar por el impacto mediático que en muchas ocasiones tienen estos casos.